viernes, 4 de julio de 2025

Ser otro o ser uno mismo.

Te veo y me deslumbro. Me gustan tus ojos, esa reacción de sorpresa en tu rostro ante un comentario jocoso, esa mirada semi inocente y sexy que deja entrever una sombra de amor oculto. Me seduce tu manera de pensar, la manera en que enfrentas las vida... nuestras ganas de soñar son las mismas y eso hace que la locura sea compartida, que exista un rayo de esperanza diciéndome al oido esta vez no va a ser mentira.

Pienso en esas cosas y en lo que puede pasar "ese" día... recuerdo historias que no fueron y callo por dentro el deseo de ser otro, ser el que realmente tú quieres encontrar en mi. Pero ¿cómo saber que quieres?

Quisiera ser perfecto para ti y asi que tú hagas mi vida completa.

Sería injusto no ser yo mismo, usar una careta que tarde o temprano caería. Pero... ¿y si acaso soy justamente yo al que buscás? ¿Si mis defectos y virtudes son exactamente lo que quieres? Me imagino perdiéndote por no ser yo mismo, por querer ser lo que no soy solo para tí y todo toma sentido...

Prefiero el dolor de no ser correspondido a el actor de una obra de teatro que a comparación de la vida, es brevísima. Y es en este momento cuando soy feliz y tomo conciencia de lo bello que es la vida, en sus idas y venidas. Aprovecharla no es una opción, es un deber, quiero llegar a tus manos y sonreir en el proceso, más allá de lo que este nos depare.

Gracias por todas estas semanas, por tú sinceridad y compañía.

9/9/10 0:21 - Este escrito es parte de un par de publicaciones que no vieron la luz en su momento, por ello los publico con fecha y hora del momento que se guardó, para no perder la temporalidad.

Todo pasa...

Te ofrecieron algo, dijiste que no, te lo ofrecieron de vuelta, dijiste que no, te dieron a entender que era esto o te estancas. Terminas yendo, sabiendo que probablemente no puedas... Lo decís y vas, cruzando los dedos, esperando lo mejor, sabiendo que fácil no va a ser pero quizás se acomode todo.

Pasa el tiempo, no funciona, la pasas mal, no funciona, volves a intentar y no hay caso. Levantas la mano, para evitar problemas y te evitan. No sos quien querían que fueras y ahí seguís. Detenido en el tiempo, sin rumbo ni marca, dando manotazos de ahogado  y nadie te da una mano. Terminas sintiéndote de lo peor, por una decisión ajena y duele. Tratan de hacerte creer que esto es así, esa es la única verdad. No encontras el rumbo pero seguís chapoteando porque eso aprendiste a hacer, aguantar, porque esta crisis es una oportunidad que no llega... Aunque esto tiene más sabor a oportunidad convertida en crisis eterna. Seguís como el caballo y sus orejeras, andando el mismo camino, aguantando porque no conoces otro, ese viste toda tu vida y esa es la realidad viva, aunque por un costado vuelen unicornios dorados o asesinos de sueños...

No hay respuestas, quizás no las tengan o tal vez sea más fácil no tenerlas... Y derivan indirectamente el problema en uno, uno que no quiso intentar (¿Qué?), uno que pierde así la oportunidad de vaya a saber que, de seguir aguantando mientras otros se desligan del problema, se lavan las manos y si algo sale mal, la culpa es de uno. Porque no importan todas las horas, las ganas que invertiste, no importa si lo advertirte o si no querías. No importa si querés que evitar que esto empeore... Lo importante es que no aguantas, que no podes y perdiste la oportunidad.

Y ahora ¿qué haces? Sos nadie en el medio de todo pero a nadie le importa... Nadie sos vos mismo, que no pudiste, que no sabes que hacer, que no te haces valer. Pegar el portazo, que hacer o no. Aguantar un poco más, todo pasa... Todo pasa...

12/12/2018 - 23:27

Este escrito es parte de un par de publicaciones que no vieron la luz en su momento, por ello los publico con fecha y hora del momento que se guardó, para no perder la temporalidad.