domingo, 14 de marzo de 2010

Atracción.

Podemos aspirar a cualquier cosa, 

pero no la obtendremos solo por desearla.

Preferiría pasar mi vida cerca de las aves

que desperdiciarla deseando tener alas.


Pasé varios minutos pensando el porque suceden ciertas cosas o como es que uno se esfuerza tanto por lograr algo y aún así no sucede. Es frustrante, desalentador, incluso puede ser aterrorizante... Sin embargo creo sinceramente que el hecho de tener ciertos fundamentos, bases y puntos de partida son necesarios para no decaer y buscar nuevamente el objetivo deseado.

En palabras más simples, el hecho de tener seguridad sobre lo que se quiere, el porque se quiere, el estar convencido internamente que es algo bueno al menos para uno mismo, son algunos de esos ejes que nos dan el soporte necesario para los cimbronazos que nos da la vida.

Paralelamente pensé ¿qué es lo que lleva a sentir esa atracción o sensación de superación y bienestar?

Viendo un capítulo de Dr. House saqué la frase que encabeza este escrito creyendo que era algo motivador, hermoso, digno de ser resaltado. Retrocedí unos segundos y me propuse copiarla vaya uno a saber para que, simplemente me gustó al primer vistazo y eso me motivó a detener el curso del capítulo y tratar de resguardar ese momento. Cuando relei la frase me di cuenta que no era tan perfecta como creia. En realidad hasta podría decir que más que alentadora, es una frase pesimista o al menos conformista. La podríamos comparar a la más difundida "más vale pájaro en mano que cien volando".

En este caso a mi me motivó el hecho de creer haber encontrado algo bueno, uno de esos puntos de partida donde amarrar lazos en nuestra vida; pero casi inmediatamente noté que no era tan bueno como pensaba. De aqui puedo sacar dos conclusiones:

a) No todo es lo que parece. Efectivamente a todos nos pasa que nos ilusionamos, encontramos la motivación para realizar determinadas cosas y cuando estamos en el trayecto notamos una realidad mucho más amplia. Ante esto algunos desisten y otros tantos siguen convencidos de que se puede lograr algo más, aún cuando no sea algo tan bueno como se pensaba. Lo más importante creo es dar todo de uno mismo y pelear por lo que se busca, pero usando el camino más firme posible, manteniendo los riesgos potenciales controlados. No irse de boca como dicen por ahi.

b) Quizás la frase no es tan mala después de todo. Si, pensándolo bien nada es absoluto en esta vida. Los seres humanos cambiamos de opinión constantemente por pequeños sucesos que van alterando nuestro actuar. Es por eso mismo que reafirmo el hecho de que vivir al lado de los pájaros sea una forma al menos, de ser fieles a nuestro objetivo. Quien sabe, tal vez nunca tengamos alas, pero el hecho de estar tan ensimismados con la meta deseada, quizás nos haga ver formas alternativas de lograrla y podamos diseñar a nuestra manera, algún elemento que nos permita volar.

Por último, que logremos el hecho y podamos surcar los cielos ¿nos va a dar la felicidad permanente que buscamos? Ciertamente no, pero el hecho de buscar un resultado con tanto afán y luego de varios intentos poder llevarlo a cabo, nos va a otorgar ese nivel de satisfacción. Esta no es más ni menos que la atracción,  que nos lleva a buscar realizarnos. Así nos adentramos en un círculo virtuoso donde logremos fijar nuevas metas una y otra vez, para así lograr de una forma un poco más teórica pero no menos cierta, la famosa felicidad permanente.

Esto es la atracción para mi, aplicado a cualquier nivel de nuestras vidas (familia, relaciones humanas, amor, trabajo, etc.). Es lo que me mueve a querer mejorar, a luchar por mis ideales, por mi familia, mi pareja y amistades.

M.A. Laplagne - 14 de marzo de 2010

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario. Slds!